Ya de adulto creí que el miedo había quedado atrás. Preocupaciones si, siempre tengo y tuve. Pero miedo hacía rato que no sentía. Comenzó con un chiste en el cual varios personajes terrorificos concordaban en que lo mas horrorifico que conocian era un humano de traje. Ahí caí en cuenta que es cierto.
Que la batalla está casi perdida. Que esta gente infeliz está llevando a la humanidad a el centro de la mierda.
Y que vamos a terminar hundidos hasta el cuello, con suerte.
Entre políticos, ejecutivos, abogados y magnates nos estás haciendo pedazos cada vez más rápido. Me cagaron el día.